Para la sexta edición del Festival Internacional de Cine de Quito, organizado por la Escuela de Cine de la Universidad de Las Américas, Wilmer Pozo, Rafael Méndez, Nantu Mantilla, Jonnathan Carchi, Mayky Alvarado y David Yépez presentaron sus cortometrajes para que sean proyectados en la pantalla grande de 8ymedio.
Carolina Rodríguez y Nicole Espinosa estudiantes de periodismo de la UDLA entrevistaron a estos 6 directores y nos traen un poquito de su historia.
Por: Nicole Espinosa Chávez
Para hablar sobre esta directora es importante mencionar que entre los seis directores ecuatorianos que participan en la sexta entrega del Festival Internacional de Cine, Nantu Mantilla es la única mujer. Al ser la única esto evidencia que el cine es un arte que tampoco se salva de la distinción de género y en pleno siglo XXI este espacio sigue siendo muy limitante para las mujeres directoras.
Por ejemplo en el caso de Nantu ella indica que “mientras los hombres tienen el protagonismo de la dirección o de los espacios técnicos. En mi caso si ha sido un poco luchado por ser reconocida dentro de un aspecto más creativo.»
A pesar de eso, su facilidad para organizar y atender cosas logísticas ha hecho que Nantu se merezca su reconocimiento en espacios donde siguen existiendo formas patriarcales dentro de los rodajes. Además hace una crítica al comportamiento autoritario que suelen tener los directores bajo una idea de «liderazgo» y ahí sostiene que «como mujeres debemos buscar formas de diálogo que sean de formas más afectivas, que no haga falta alzar la voz para poder decidir. Si no desde el respeto.»
Con respecto a sus productos audiovisuales hay algo que caracteriza al trabajo de Nantu y son los cortometrajes observacionales. En mi carpa roja, “todo se trata del espacio, como este se transforma, se construye, se deconstruye y como es disfrutado por los niños.” La magia de un circo es más latente desde la mirada de los niños y todas las dinámicas que hay detrás de este mundo son interesantes cuando se considera que la forma de vivir de los circenses, siendo nómadas, no está validada por la sociedad. Eso era lo que Nantu desde pequeña percibió de este arte.
Ahora con la capacidad y el talento en sus manos para contar historias decidió indagar a profundidad que pasaba con las familias circenses. Con la finalidad de reflejar en un cortometraje documental la pérdida de una tradición y la falta de apoyo por parte de las instituciones públicas y privadas.
Comments
comments
